Reinosa en Común quiere "cargarse" uno de los actos clásicos de sus fiestas

La elección de la Reina y las Damas de las fiestas de San Mateo en Reinosa es uno de los eventos clásicos que generan las fiestas mateas, además de ser uno de los eventos más esperados por las chicas de la Capital Campurriana año tras año.

Pues bien, para Reinosa en Común, lejos de seguir la tradición de sus vecinos y mantener la "ilusión" de sus vecinas más jóvenes, pretenden eliminarlo.

REC, partido que nació junto as los círculos de Podemos en Reinosa (que nombró a una ex-concejal del PP como su consejera en al empresa pública EMUPROSA), pero que diferencias organizativas les llevaron a presentarse por su cuenta a las elecciones, quieren ahora "cargarse" este evento por ser una tradición "machista".

El partido Reinosa en Común alega que en diferentes puntos del mundo se han alzado movimientos feministas y por ello, en Reinosa hay que suprimir este acto de sus fiestas.

Con este comunicado llevarán al pleno la moción "Tradición (Machista)" para la supresión del acto.

En el último año la lucha feminista ha dado un paso de gigante. Voces de mujeres se han alzado en diversos lugares del mundo (Estados Unidos, Irán, Chile, España....) para denunciar los asesinatos, abusos y dificultades que afrontamos las mujeres sólo por el mero hecho de serlo.

Y esto, ya ha quedado manifiestamente claro, no se produce por casualidad, sino por constituir un sistema estructural machista, inoculado en todos los ámbitos de nuestra sociedad, desde la justicia hasta la salud pública, pasando por la cultura, el lenguaje, la remuneración salarial, el deporte, la representación, la historia, etc.

Viniendo de lejos como es el caso, son precisamente la historia y la tradición dos elementos determinantes en la perpetuación de este sistema. La historia ha narrado a través de sus historiadores hombres, las peripecias de otros hombres, científicos, militares, políticos, filósofos, pintores, gobernantes, dioses, médicos, escritores... dejando sin lugar a las mujeres, de manera que todos los referentes han sido siempre masculinos, salvo Eva, las vírgenes y unas pocas "malas" mujeres.

Y la tradición, pues ya lo dice la RAE: "doctrina o costumbre conservada en un pueblo por transmisión de padres a hijos", ha sido una herramienta fundamental para continuar a través de siglos y generaciones con la subordinación de la mujer al hombre.

Volviendo al paso de gigante del principio, aunque pocas cosas han cambiado, las voces se han escuchado en las calles, y una gran parte de la sociedad ya no está dispuesta a que las mujeres sigamos siendo objeto de discriminación, cosificación y desigualdad.
Por eso, en este nuevo escenario, cada día parece más increíble que en algunas ciudades y pueblos de España se siga manteniendo una tradición tan machista y denigrante como la elección de reina y damas de la fiesta.

Veamos, hagamos el ejercicio de explicarle a alguien con absoluto desconocimiento del asunto, en qué consiste dicha tradición: una selección de mujeres jóvenes para que adornen las fiestas locales con su presencia, siguiendo criterios de belleza, elegancia, y saber estar, que refuerzan un canon estético dominante, que de ninguna manera refleja la realidad y diversidad de los millones de mujeres que habitan el planeta.

El mensaje que enviamos a las niñas y adolescentes que viven con ilusión este acontecimiento es demoledor. Primero porque excluimos a todas aquellas que no cumplen con el criterio de belleza normalizado y homogéneo, y segundo, porque cada vez que le decimos "guapa" a una niña, o ponemos en valor su belleza y sus "buenas maneras", estamos indicándole dónde puede destacar, y por omisión, perdiendo la oportunidad de ponderarla para ser valiente, poderosa, decidida o fuerte.

Y esto, es un clavo más en ese ataúd, que es el machismo en nuestra sociedad. Ya sabemos todas lo difícil que resulta romper con una costumbre, sobre todo cuando se la considera inocua. Pero si no conseguimos cambiar una tradición que somete a mujeres jóvenes al dictado de un canon estético, no podremos avanzar sin lastre en la lucha por la igualdad, los derechos y las libertades de la mujer, es decir, de la mitad de la sociedad.

Por todo esto, desde Reinosa en Común, llevaremos a pleno una propuesta para la supresión de la elección de reina y damas de San Mateo, y sustitución si se desea, por otro tipo de representación para las fiestas mateas, basada en principios de igualdad y que fomente otros valores como la solidaridad, la participación, el compromiso, el respeto a la diversidad etc., y no la competición basada en el aspecto físico de las personas.