La directora del Instituto de las Mujeres urge abordar "una reorganización justa de los cuidados"

Mª Antonia Morillas, Directora Del Instituto De La Mujer, En La UIMP.

La directora del Instituto de la Mujeres, Toni Morillas, ha defendido la necesidad de que el Gobierno aborde una "reorganización justa" de los cuidados. "Tenemos la responsabilidad de ver cómo se construye un modelo y diseño de políticas públicas que garanticen derechos a los cuidados en este país", ha asegurado.

Morillas, que dirige en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) el encuentro 'Hacia una radicalización feminista de la democracia', ha señalado que "todas las personas necesitamos ser cuidadas en algún momento de nuestras vidas", una labor, en la mayoría de los casos no remunerada, que recae principalmente sobre las mujeres "incidiendo directamente en el mercado laboral".

Por ello, considera que es una problemática que hay que abordar "con perspectiva de género para que no se reproduzcan las desigualdades", ha informado la UIMP en nota de prensa.

Según Morillas, esta reorganización de los cuidados forma parte de un "menú de urgencias amplio" que tiene el Gobierno de España en materia de Igualdad, y que incluye también la reforma de la ley de salud sexual y reproductiva, una normativa cuya modificación está "en proceso de diálogo y participación".

La directora del Instituto de las Mujeres ha explicado que las prioridades de su institución son "derogar la modificación de 2015 que limitaba derechos sexuales de niñas de 16 y 17 años, eliminar los tres días de reflexión, pero sobre todo garantizar educación sexual integral para todos".

En este ámbito, Morillas sostiene que "hay un amplio margen de mejora" para construir una educación sexual "en todas las etapas de la vida y todas las etapas educativas".

DEMOCRACIA FEMINISTA

Este encuentro trata de profundizar en la conexión entre el debate universitario y la formulación de políticas públicas, uno de los objetivos principales del Instituto de la Mujer. "Tenemos la responsabilidad de impulsar y promover la aplicación de la perspectiva de género de una manera transversal en todas las políticas públicas que se impulsan desde el Gobierno de España", ha explicado Morillas.

Esta perspectiva ayuda a conseguir, según ha dicho, una democracia más justa, apoyándose en los movimientos sociales. "Muchos de los avances democráticos responden a las luchas y a los derechos conquistados por los movimientos feministas", ha asegurado, citando como ejemplo el derecho al divorcio.

De este modo, Morillas llama a "seguir trabajando desde la óptica de ensanchar y mejorar las condiciones de vida de todos" desde una perspectiva feminista "Sin feminismo no hay democracia", ha apuntado.

En este sentido, ha incidido en la necesidad de tener en cuenta la igualdad para construir una democracia más plena. "Consideramos que el contrato social sobre el que se ha fundamentado esta democracia se ha construido desde la exclusión de las mujeres y ciudadanía de segunda por parte de las mujeres", ha señalado.

De ahí que, a su juicio, sea esencial trasladar todos estos debates a las políticas públicas. "En este curso pretendemos analizar marcos e instrumentos que nos permitan identificar las desigualdades de género en el ámbito económico, social, judicial, de manera que podamos extraer conclusiones para fortalecer derechos feministas y ampliar la democracia desde mirada inclusiva", ha añadido.

AGRESIONES HOMÓFOBAS

Para Morillas, el movimiento feminista "debe establecer alianzas con el movimiento LGTBI+", ya que en su opinión las problemáticas que sufren ambos colectivos "se retroalimentan" y tienen su base en el mismo origen, "el patriarcado".

En este sentido, ha aludido al "repunte" vivido en España de agresiones homófobas y reflexiona sobre el papel de los organismos públicos. "Nos tiene que situar ante una responsabilidad de estado para ver qué tipo de políticas públicas podemos aplicar para acabar con los discursos de odio", ha afirmado.

Estos discursos son en su opinión "el principal caldo de cultivo de esta violencia", que "se reitera y está en un momento de escalada". De este modo, llama a "condenar y poner coto a los discursos de odio", cuyos emisores son, según apunta, "responsables públicos en muchas ocasiones".