El mes de abril, que este año sí ha cumplido el refrán de "aguas mil", termina con precipitaciones y tormentas en buena parte de la Península y este viernes llega mayo con tiempo estable, sol y temperaturas más altas de lo normal que podrían superar los 30 grados en algunos puntos de la Península.
La transición entre ambos meses estará marcada por las lluvias y un ambiente estable, con temperaturas en ascenso. Así, con la llegada de mayo se pone fin a un abril muy lluvioso.
La primera quincena llovió entre un 55 y un 60 por ciento más, de modo que ha sido muy húmedo prácticamente en todas las zonas, excepto en el Cantábrico donde, por el contrario ha sido seco, incluso ha llovido menos de la mitad de lo normal, especialmente en el litoral norte de Galicia y de Asturias, Cantabria y País Vasco, según la AEMET.
Este jueves soplará el viento del Oeste en amplias zonas del norte y del este peninsular y las precipitaciones en cambio irán poco a poco quedando restringidas al noroeste de Galicia y comunidades cantábricas.
Estos días, con altibajos, las temperaturas serán en general algo frescas para la época en el oeste y algo más altas de lo normal en el este peninsular y a orillas del Mediterráneo.
El 1 de mayo, viernes, se prevé que el tiempo cambie "radicalmente" y posiblemente una dorsal anticiclónica proporcionará tiempo estable, con lluvias ya "tan solo" en Galicia y habrá cielos poco nubosos en el resto.
Asimismo, las temperaturas subirán de forma "notable" y se darán lugar a valores "inusualmente altos" para esta época del año ya que se superarán los 30ºC en el área del mediterráneo y mitad sur peninsular.
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