El exdirector general del Racing de Santander Antonio Corino ha afirmado que, durante la etapa de Ángel Lavín como presidente del club, le alertó de que los gastos en los que estaba incurriendo la entidad, que atravesaba entonces una complicada situación económica, eran "excesivos" y también de que los estatutos de la entidad no contemplaban que tuviera un sueldo por el desempeño de su cargo.
Así lo ha afirmado este miércoles durante la vista del recurso presentado por Lavín, conocido como 'Harry', contra la sentencia del Juzgado de lo Penal número 1 de Santander que en abril de 2019 le condenó a tres años y medio de prisión por un delito continuado de administración desdeal durante su etapa al frente del club cántabro, imponiéndole ademas una indemnización de 216.400 euros.
En esta vista, además de Corino, han declarado Marco Puente, que esa época era administrador de la empresa Blu Sistemas y Proyectos, que fue contratada por el Racing entonces para la prestación de diversos servicios, y también José Ignacio Urquijo, contratado como director técnico deportivo de todos los equipos de todas las categorías salvo el primer equipo.
Precisamente, el salario que se asignó como presidente y estas dos contrataciones --la de Blue y la de Urquijo-- son tres de los cuatro motivos en los que se basa la condena del Juzgado de lo Penal contra Lavín por un delito continuado de administración desleal.
EL SUELDO DE LAVÍN
En cuanto al sueldo de Lavín, Corino ha relatado que sobre el mes de septiembre de 2012, el entonces presidente del club le llamó a su despacho para decirle que consideraba "lógico" percibir una remuneración por su trabajo, a lo que le respondió que los estatutos del club solo contemplaban que percibiera dietas por su labor pero no un sueldo. También ha señalado que a no le consultó sobre la necesidad de ser dado de alta.
Finalmente, en diciembre de 2012, la Junta General de Accionistas aprobó una asignación para Lavín de 72.000 euros anuales, una asignación superior a los 66.000 euros que cobraba el propio Corino.
Respecto a esta cuestión, Corino ha señalado que "no le consta" que dicha asignación aprobada para Lavín fuera aprobada por el Consejo de Administración.
EL CONTRATO DE BLU
Y respecto al contrato con la empresa Blu, ha afirmado que él no tuvo "ninguna intervención" en el mismo y tuvo conocimiento de la existencia del mismo en el mes de octubre, meses después de que la empresa comenzara a prestar ya servicios para el Racing de Santander (la fecha del contrato es de agosto de ese año).
Además, ha explicado que le llegaron varias facturas por parte de esta empresa en las que no se acreditaba la justificación del gasto, tras lo que se dirigió al coordinador que esta empresa tenía en el Racing para indicarle que debía completar la factura con la documentación acreditativa para que pudiera contabilizarla y abonarse.
De hecho, ha indicado que facilitó al coordinador de Blu un modelo de hoja de trabajo para que pudiera justificar el gasto que facturaba, tras lo que la empresa "rectificó" y comenzó a aportar dicha justificación para poder cobrar esas facturas.
Esta empresa facilitaba, entre otros servicios, personal que servía de apoyo al club en los partidos. Sin embargo, para Corino había un "exceso de personal" en esos encuentros, algo que, a su juicio, "no tenía que haber sido".
"Había muchísima gente", ha dicho el exdirector general del Racing que también ha comentado que, en esa época, el club ya contaba con un coordinador pero Blu puso el suyo, con el coste que ello conllevaba.
En otro punto de su declaración, ha señalado que las dependencias del club parecían "el Paseo Pereda", con gente que desconocía si estaba o no contratada.
Por su parte, en la vista del recurso celebrada en la Sección Primera de la Audiencia Provincial, el administrador de Blu ha explicado que, de forma general, su empresa se dedicaba a la actividad encargó de prestar "servicios auxiliares" para el Racing, que la entidad ya tenía, según ha dicho, externalizados.
De hecho, ha indicado que, de hecho, solo se limitó a sustituir a una empresa que prestaba servicios para el Racing y que no podía continuar con su actividad ya que el resto de contratos que ya tenía externalizados con otras empresas estaban "blindados".
Puente ha reconocido que su empresa prestó servicios al Racing desde aproximadamente julio, un mes antes de la firma del contrato.
Desde esa fecha hasta marzo de 2013 constan en la causa facturas que suman en torno a 170.000 euros por servicios que, según ha indicado, sí se prestaron de forma efectiva. Además, Puente ha aclarado que, de esa cantidad, el Racing le adeuda 50.000 euros que no le fueron abonados.
Por otra parte, ha reconocido, a preguntas del letrado de la acusación --que ejercen la Asociación de Exjugadores del Racing y la Asociación Unificada de Pequeños Accionistas (AUPA)-- que en el momento en que su empresa fue contratada por el Racing no desarrollaba ninguna actividad ni contaba con personal, un hecho que Puente ha atribuido al modelo de funcionamiento que tenía el grupo empresarial al que pertenecía.
Ha indicado que la empresa estaba "esperando que surgiera una proyecto que le interesara", que en este caso fue prestar servicios para el Racing.
EL CONTRATO DE URQUIJO COMO DIRECTOR DEPORTIVO
Y, por último, en la vista, ha testificado José Ignacio Urquijo, que en marzo de 2013, durante la etapa de Lavín como presidente, fue contratado como director técnico deportivo de todos los equipos de todas las categorías salvo el primer equipo, con un salario de unos 6.000 euros brutos mensuales y la posibilidad de percibir primas.
A preguntas de las partes, Urqujo ha asegurado que sí desempeñó la labor por la que fue contratado, la de director técnico deportivo de las categorías inferiores y ha recordado que, en su etapa, logró sacar a varios jugadores de la cantera por los que el Racing percibió ingresos.
Además, ha indicado que, finalmente, percibió únicamente 16.000 euros del total previsto y no llegó a cobrar ninguna prima de las que se planteaban en el contrato ni tampoco indemnización cuando se fue.
LAVÍN: "HA QUEDADO MÁS CLARIFICADA MI INOCENCIA"
Tras concluir estas testificales, la defensa de Lavín ha considerado que de estas declaraciones, ha quedado constatado que la empresa Blu prestó de forma efectiva los servicios por los que fue contratado y que el contrato de Urquijo como director técnico deportivo no es simulado. En cuanto al sueldo de Lavín considera "muy sensata" la cantidad que se le asignó.
Por todo ello, ha reclamado la estimación del recurso presentado contra la sentencia que condena a su representado.
Por contra, el fiscal y la acusación han reclamado la desestimación del recurso de Lavín al considerar que en la vista ha quedado acreditado, e incluso "reforzado", que las actuaciones de Lavín en el Racing por las que ha sido condenado por administración desleal fueron perjudiciales para el club.
Antes de darse por cerrada la sesión, el propio Lavín ha hecho uso de la palabra para afirmar que con la vista celebrada hoy ha quedado "más clarificada su inocencia".
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