La Biblioteca Central de Cantabria acoge desde hoy y hasta el 20 de octubre la primera exposición antológica del pintor cántabro Sergio Sanz, compuesta por más de una veintena de obras y comisariada por Juan González Riancho.
La muestra, en orden cronológico, recoge la evolución del autor desde 2004 hasta 2017. Las obras han formado parte de otras exposiciones, algunas en Santander.
Sanz ha precisado que se trata de su primera retrospectiva y por tanto se trata para él de una "experiencia muy nueva", que le resulta "muy emotiva".
El comisario ha explicado que las obras ya han sido expuestas en la galería madrileña Marlborough, si bien nunca habían formado parte de un proyecto común.
Los cuadros son fruto de 14 años de colaboración del pintor con la citada galería y, según González Riancho, su trabajo ha sido "más fácil de lo previsto" puesto que la selección ha respondido a la intención del autor de mostrar su transición de una pintura "con una base más literaria, con figura humana" a otra más abstracta "y casi metafísica y espiritual".
La inauguración, además de Sanz y el comisario, ha contado con la asistencia del vicepresidente y consejero de Cultura, Pablo Zuloaga, acompañado por la directora general de Innovación Cultural, Eva Ranea.
Zuloaga ha señalado que el objetivo de esta exposición es "reconocer" la obra del pintor cántabro en su tierra y al mismo tiempo hacer que la Biblioteca Central sea "un foco de atracción cultural", lo que es un objetivo prioritario del Gobierno.
Se trata de poner este tipo de espacios a disposición de artistas consolidados, como Sergio Sanz, pero también de los jóvenes. "Se trata de que esta Biblioteca Central sea motor cultural no solo para Santander, que ya lo es, sino para toda Cantabria, dando respuesta a los jóvenes creadores" de esta región que "esperan ser reconocidos de su tierra y poder salir de aquí y triunfar".
El consejero ha asegurado que la exposición de Sanz es "una delicia" por cuanto se puede contemplar su evolución "desde las figuras humanas hasta esos trazos de naturaleza del final de la época, que te transporta a muchos lugares que se llegan a reconocer de la ciudad de Santander".
Por ello ha trasladado su enhorabuena al autor y a la Biblioteca Central "por convertirse de nuevo en foco cultural de Santander y de Cantabria".
El autor es hijo de los pintores Eduardo Sanz de Isabel Villar y muestra una singular personalidad expresiva que le ha hecho difícil de encasillar en tendencias y corrientes artísticas.
Se trata de una colección inédita en su conjunto, aunque algunas de estas obras ya se han mostrado en la galería Marlborough, y es fruto de más de quince años de trayectoria del autor. Se muestran visiones personales de la naturaleza, sus últimos trabajos, y descripciones de personajes marginales o músicos de jazz.
