El consejero de Industria, Turismo, Innovación, Transporte y Comercio, Javier López Marcano, y la alcaldesa de Ruiloba, Sara Portilla, han inaugurado en el barrio de Trasierra de este municipio un área de descanso con zona recreativa y un tótem informativo con wifi y puesto para la recarga de teléfonos dirigido a mejorar la actividad de los peregrinos que hacen el Camino de Santiago o el Camino Lebaniego.
La Consejería ha destinado casi 78.000 euros a esta actuación, realizada, según ha destacado en un comunicado el Gobierno regional, "en un lugar estratégico" pues es donde comienzan diferentes rutas por el litoral costero y la playa de Luaña.
En la inauguración de este martes, Marcano, que ha estado acompañado por el consejero delegado de CANTUR, Fernando de la Pinta, ha señalado que la Consejería ha actuado en un punto neurálgico donde se conjugan los valores ambientales, paisajísticos, culturales de esparcimientos y recreativos que fortalecen los atractivos de Ruiloba, "moteado de muestras muy singulares" de patrimonio artístico arquitectónico civil y religioso.
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"Hemos convertido en hito este lugar de referencia que está a la vera de los caminos y que nos interesa potenciar porque nos adentramos en la recta final de los preparativos del que va a ser nuestro Año Jubilar en 2023", ha afirmado el consejero.
Por su parte, la alcaldesa, Sara Portilla, además de valorar la recuperación de un espacio que se convierte ahora en un punto de atracción turística, ha destacado que estas obras son importantes porque dan a conocer a Ruiloba y sus atractivos y al mismo tiempo ofrecen un área de descanso a los peregrinos para descansar, con sitios wifi, recarga de teléfonos móviles y área recreativa y espacio para jugar que se extiende al disfrute de vecinos y visitantes.
ÁREA DE DESCANSO, INFORMACIÓN, JUEGOS E INTERNET
El área de descanso para peregrinos y la instalación de un tótem o monolito con cartel informativo sigue el mismo modelo que los instalados en otros municipios por los que pasa el Camino Norte de Santiago, así como en los once municipios del Camino Lebaniego.
El tótem consiste en un monolito de piedra con forma de 'L' y de planos rectilíneos que ayuda a conocer la zona con los puntos turísticos de interés del municipio. Está decorado con los iconos de la concha (identificativa de los peregrinos del camino de Santiago) y del Lignum Crucis (identificativo del Camino Lebaniego).
Se han utilizado materiales resistentes a las inclemencias climatológicas (piedra de sillería y acero corten). Junto al tótem se ha instalado un panel informativo en plancha de aluminio rotulada en vinilo con los principales recursos turísticos del municipio.
Con la instalación de estos tótems se pretende poner en valor los dos caminos de peregrinación que existen en Cantabria, ambos Patrimonio de la Humanidad.
Se ha dotado a la zona de una red pública de wifi, alimentada mediante baterías conectadas a la línea de alumbrado y de un enchufe eléctrico para la recarga de dispositivos móviles.
Además, cuenta con mesa merendero, mesa de juegos, papelera, banco doble, un juego de la rana, una mesa para jugar al ping-pong y una zona de juegos infantiles (sustituyendo los ya existentes y degradados) cuyo pavimento de caucho garantiza la seguridad de los niños.
La construcción del mirador es un complemento de la zona que aprovecha la configuración de terraza elevada respecto al terreno colindante y el entorno, que genera una plataforma con excelentes vistas hacia el mar y los parajes de la zona.
En el mirador se han colocado bancos y papelera, además de barandilla de madera y en su frente barandilla de vidrio templado transparente.
