Rodríguez sobre la Navidad: "Me parecería bien una horquilla entre 6 y 10"

El Consejero no ha comparecido en la rueda de prensa esta mañana, como estaba previsto, y ha dado estas declaraciones a Radio5 a nivel nacional
Consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, en el Parlamento
photo_camera Consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, en el Parlamento

El consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, ha abogado por la prudencia a la hora de decidir la eliminación de las restricciones para contener la incidencia del COVID: "Nosotros creemos que hay que ser prudentes, que no se pueden levantar las medidas rápidamente, porque eso nos abocaría a tener una nueva ola incluso en diciembre o a comienzos de enero", "lo que no queremos es una tercera ola," ha reiterado en una entrevista en Radio Nacional. 

El Consejero ha avanzado que la propuesta que llevará Cantabria al Consejo Interterritorial de Salud, es que si los niveles de incidencia acumulada son los actuales, "debemos mantener una línea restrictiva y mantendríamos el confinamiento de cara al puente, y de cara a la Navidad, dependiendo de cómo estén los datos. Si siguen como hasta ahora, por encima de los 400 casos por 100.000 habitantes de incidencia acumulada en los últimos 14 días, una incidencia alta, seríamos partidarios de mantener estas restricciones".

En cuanto a las reuniones de personas de cara a las fiestas, "la propuesta de 6 me parece bien, y me parecería bien establecer una horquilla entre 6 y 10, pero hay que poner una limitación, porque el Instituto Europeo de Control de Enfermedades ya alertó de que si se levantan las medidas restrictivas de forma apresurada en el puente, habría una tercera ola en Navidades, y que si se levantaba en Navidad, habría una tercera ola para primeros de enero, y nadie lo queremos". 

Sobre el toque de queda ha indicado que "somos partidarios de mantenerlo, si hay que hacer excepciones algún día concreto ya se valorará, pero somos partidarios de mantener el toque de queda a las 22:00 horas."

Evolución positiva

Respecto al efecto de las medidas que se han ido adoptando, ha destacado que van "en una línea positiva, pero todavía la presión hospitalaria es alta, sobre todo en la UCI, por encima del 30% de camas ocupadas, y aunque va en línea positiva, los efectos se notan muy lentamente. Así como la capacidad infectiva, de  transmisión,  es muy rápida, y se extiende muy rápidamente, una vez establecidas las medidas restrictivas, los efectos se producen a largo plazo, a partir de 10-14 días y de manera lenta". 

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