El informe de 2017 de Proyecto Ríos sobre el estado de los ríos de Cantabria concluye que la mitad de los tramos fluviales estudiados presentan afecciones en sus aguas o riberas.
El estudio se ha basado en el muestreo de las cuencas cántabras por más de 600 voluntarios que han investigado 50 tramos en la campaña de primavera y 53 en la de otoño, distribuidos en las cuencas del Asón, Besaya, Camesa, Campiazo, Deva, Ebro, Miera, Pas, Pisueña y Saja.
El informe, dado a conocer hoy, señala que, con respecto a los índices de calidad (agua, bosque de ribera y hábitat), aproximadamente la mitad de los tramos presentan un estado ecológico de conservación "deteriorado" en mayor o menor medida, bien por alteraciones en la calidad del agua o del bosque de ribera.
Así, en cuanto a la calidad biológica del agua, los datos varían entre la campaña de primavera, donde la mayoría de los tramos (71%) presentan una calidad buena, y la campaña de otoño, donde la mayor parte de los tramos (55%) presentan un estado moderado o deficiente.
En ambas campañas, destacan unos 10 tramos con un estado de conservación muy bueno y, por el contrario, tres tramos tienen sus aguas con un estado malo.
También en cuanto al agua, los voluntarios destacan en ambas campañas que el caudal es menor que en años anteriores en el 70 % de los tramos. Los parámetros organolépticos (color y olor) son, en general, normales.
En cuanto a la temperatura, durante la campaña de primavera los termómetros oscilaron entre 9 y 23 ºC, y durante el otoño entre 10 y 19 ºC. El informe destaca también que el 25% de los tramos presentan vertidos o colectores.
Por lo que se refiere a las riberas, la calidad del bosque en ambas refleja que más de la mitad de los tramos tienen sus riberas en mal estado, debido a canalizaciones, infraestructuras, ocupación de las riberas o por la inexistencia del bosque de ribera. Además, la práctica totalidad de los tramos presentan residuos sólidos, en mayor medida plásticos.
En el apartado de biodiversidad, se citan especies protegidas en un tercio de los tramos en todas las cuencas investigadas, siendo las más frecuentes la nutria, el martín pescador o la garceta común en el caso de la fauna, y el nenúfar amarillo presente únicamente en el río Camesa.
ESPECIES INVASORAS
La presencia de especies invasoras pone de manifiesto un "grave problema" en los ríos cántabros, según el informe. Así se han generado 211 citas de flora invasora de 26 especies diferentes, siendo las más abundantes bambú japonés, plumero, crocosmia, tradescantia, mimosa y falsa acacia. Las citas de fauna invasora se limitan a cangrejo señal y americano, galápago de Florida, visón americano y trucha arcoíris.
El documento completo está a disposición de cualquier persona interesada en la página web de la asociación (www.redcambera.org). Se trata de décimo informe anual de Proyecto Ríos, programa de voluntariado y ciencia ciudadana.
