Cruce de acusaciones entre PSOE y PP por el futuro vertedero de amianto en Castañeda
El futuro vertedero de amianto que se ejecuta en el monte Carceña, en Castañeda, ha abierto un enfrentamiento político en Cantabria entre el PSOE y el Gobierno regional (PP), con acusaciones cruzadas de “oscurantismo” y de “meter miedo” a la población.
La portavoz del PSOE en Cantabria, Ainoa Quiñones, ha denunciado este martes la “falta de transparencia” del Ejecutivo y ha reclamado que se aporte “toda la información” sobre un proyecto que, asegura, provoca “máxima preocupación” entre los vecinos por tratarse de un material “muy peligroso para la salud pública” y cancerígeno.
Quiñones, que ha comparecido junto a los secretarios generales de las agrupaciones socialistas de Castañeda, Santa María de Cayón y Piélagos y el portavoz parlamentario, Mario Iglesias, ha instado al Gobierno y a los alcaldes de estos tres municipios —todos del PP— a convocar asambleas abiertas para explicar en detalle el proyecto, sus plazos, la forma en la que se trasladará el amianto y las posibles afecciones. Ha pedido además que se presenten los informes técnicos que lo avalen.
La dirigente socialista ha planteado dos escenarios, ambos negativos a su juicio: que esos informes existan y no se hayan compartido, lo que genera alarma, o que no se disponga de ellos, lo que consideraría “aún más grave”. Iglesias ha anunciado que el PSOE presentará iniciativas parlamentarias en septiembre para exigir información y ha recordado que España es el cuarto país de la Unión Europea con más muertes por amianto.
Quiñones ha criticado que el Gobierno no informara de la ubicación cuando anunció el proyecto y que lo comunicara “en pleno verano, cuando la gente está a otras cosas”. Ha subrayado que el actual vertedero de Monte Carceña acoge “material no peligroso” y que la nueva instalación estará a “apenas dos kilómetros” de Renedo, capital de Piélagos, y cerca de La Penilla, en Santa María de Cayón, donde se ubican empresas como Nestlé.
El proyecto, según lo conocido hasta ahora, será la primera instalación de Cantabria habilitada para la gestión de amianto. La empresa IACAN, que gestiona el actual vertedero, presentará este mes de agosto la solicitud para modificar su autorización ambiental e incluir un vaso específico para estos residuos. Según el consejero de Medio Ambiente, Roberto Media, la tramitación es “muy sencilla” y permitirá que la instalación esté operativa “en unos meses”, acogiendo, entre otros, materiales contaminantes como los de la demolición de la antigua Residencia Cantabria, lo que abaratará costes al evitar su traslado a otras comunidades.
En respuesta, Media ha acusado al PSOE de llevar “semanas intentando meter miedo en el cuerpo a la gente” y de crear “un problema que no existe”. Ha ironizado sobre la peligrosidad de la instalación, señalando que “no lleva ni una tramitación especial”, y ha explicado que el Gobierno regional pidió a IACAN que incluyera este espacio en la ampliación del vertedero para dar cumplimiento a la ley estatal que obliga a inventariar y gestionar el amianto, aprobada —ha recordado— por el Gobierno central con el voto del PSOE.
El consejero ha justificado que no se informara de la ubicación inicialmente porque se trata de una actuación “100% privada” sin financiación pública y ha criticado que Cantabria no contara antes con un vertedero de este tipo “porque nadie se preocupó”. También ha reprochado a Quiñones dedicar “tiempo de su cargo institucional a hacer oposición partidista” y le ha instado a “trabajar en lo suyo” y a dejar de “meter miedo, basura y bazofia”.
Media ha defendido que esta instalación será un recurso para que empresas, administraciones y ayuntamientos depositen amianto de forma segura y económica, y ha puesto como ejemplo municipios como Valle de Villaverde, donde, según ha dicho, sin un centro de este tipo sería difícil eliminar el material de las construcciones que lo contienen.