Un millar de voluntarios de la asociación Centinelas saldrán durante este mes de octubre a inspeccionar diferentes tramos de la costa cántabra para recoger información sobre su estado ambiental.
Principalmente se tomarán datos acerca de la flora invasora, residuos acumulados -número y tipología- y efluentes, es decir, cualquier aporte de agua dulce que llega hasta el mar.
Tras la toma de datos por parte de los Centinelas, se realizará un análisis de los mismos que será remitido a las administraciones locales, nacionales y a la coordinación europea del programa Coastwatch.
Los resultados obtenidos servirán para llamar la atención sobre los principales impactos que sufre la costa y como base para la creación y adaptación de la legislación vigente, según ha informado la asociación en nota de prensa.
El programa viene desarrollándose en la comunidad autónoma desde el año 2011 y ha dinamizado a "cientos de voluntarios año tras año", gracias a la financiación recibida por parte del Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA), órgano dependiente de la Consejería de*Fomento, Ordenación del Territorio y*Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria.
Además de en Cantabria, esta actividad se desarrolla al unísimo en otras regiones de la Unión Europea, de tal forma que entre todos los países se obtiene una fotografía del estado ambiental del litoral.
