Las Mesas de Movilidad piden a Medio Ambiente mejoras en la red de estaciones de calidad del aire

Las Mesas de Movilidad han solicitado a la Consejería de Medio Ambiente mejoras en la red de estaciones de calidad del aire y en los protocolos frente a episodios de fuerte contaminación.

Las Mesas han informado hoy de su reunión con la dirección del Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA) en su sede de Torrelavega para trasladar su "preocupación" por la red de estaciones de medición, que debe ser revaluada este año en su diseño y en la elección de los emplazamientos de los puntos de control, con especial incidencia en los situados en Santander y El Astillero, garantizando el cumplimiento de la Ley de Calidad del Aire de 2007 y los criterios de macroimplantación y microimplantación de estaciones de medición establecidos en los Reales Decretos de 2011, 2014 y 2017, han indicado.

En este sentido, han precisado que, según establece el Anexo IV del Real Decreto 102/2011, relativo a la mejora de la calidad del aire, para el dióxido de nitrógeno (NO2), las partículas en suspensión (PM10, PM2,5), el benceno y el monóxido de carbono (CO), se incluirá al menos una estación de seguimiento de fondo urbano y una estación de tráfico, siempre que ello no incremente el número de puntos de muestreo.

La relación entre estaciones de tráfico y fondo urbano se reitera en el Anexo III del citado Real Decreto, señalando como primer criterio de macroimplantación que los puntos de muestreo orientados a la protección de la salud humana deberán estar situados de manera que proporcionen datos sobre las áreas situadas dentro de las zonas y aglomeraciones que registren las concentraciones más altas a las que la población puede llegar a verse expuesta, directa o indirectamente, durante un período significativo.

Asimismo, las estaciones de tráfico deberán ser representativas de la calidad del aire de un segmento de calle no inferior a 100 metros de longitud, mientras las estaciones de fondo urbano deberán ubicarse a barlovento de las fuentes respecto a la dirección de los vientos dominantes.

En concreto, según esta normativa, las Mesas han indicado que la estación de medición de Santander Centro, que mide la contaminación derivada del tráfico urbano, debiera ser trasladada al entorno de La Marga-Castilla-Hermida, por tratarse del distrito con mayor densidad de población y con mayor Intensidad Media Diaria de tráfico motorizado y ampliar su cobertura a la medición de partículas finas (PM2,5), aparte de sufrir "intrusiones puntuales muy altas" de niveles de benceno cuyo origen está en la salida de humos de la estación de autobuses situada justo debajo del actual emplazamiento.

Otro caso es el de la estación de medición de Guarnizo, enfocada hacia la contaminación de origen industrial, que, en su opinión, debiera reubicarse en las cercanías del núcleo urbano de El Astillero, o la de Cros en Maliaño, que debiera reconvertirse de estación de industria y tráfico a otra de medición de fondo urbano e incorporar la medición de partículas finas (PM2,5).

Asimismo, las Mesas de Movilidad de Cantabria se han dirigido a la Consejería para que actualice el protocolo de actuación frente a episodios de alta contaminación por partículas en suspensión (PM10) que, en su opinión, es "obsoleto" y no está orientado a los picos ocasionales de contaminación asociados a los incendios de matorral bajo, habituales en días de viento sur en los meses de invierno.