Iniciativa Cantabria sostenible ha pedido al Gobierno de Cantabria "más transparencia y participación social" con respecto a la tramitación de la nueva Ley del Suelo, ya que ha denunciado que pretende imponer una normativa "polémica y retrógrada evitando el debate social".
Por ello, ha hecho un llamamiento a las fuerzas políticas y sociales de la región para que exijan al Ejecutivo un debate público y "serio" sobre el modelo económico que pretende impulsar en el medio rural de Cantabria, con el objeto de garantizar la conservación de los suelos fértiles y mieses mediante una adecuada ordenación del territorio.
En un comunicado remitido por Arca -una de las asociaciones que integran la Iniciativa Cantabria Sostenible- el colectivo destaca que organizar un acto público de presentación de la ley y mantener unas cuantas reuniones con colectivos por separado "no puede considerarse un proceso serio, real y democrático de participación, sino más bien una mínima formalidad de mero trámite para guardar las apariencias".
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Y alerta de que "diversos técnicos" en materia de ordenación territorial ya han manifestado su rechazo a este proyecto de ley por considerar que "sacrifica el interés general de toda la comunidad e hipoteca para siempre su futuro solo para beneficiar a corto plazo a una minoría".
A juicio de Iniciativa Cantabria Sostenible, la ley que se está tramitando es "contraria" a los principios de sostenibilidad impulsados por la Unión Europea y la normativa estatal española y tendrá "consecuencias irreversibles" para el territorio regional.
"El proyecto de ley promueve el sellado de suelos fértiles mediante la expansión generalizada de viviendas unifamiliares aisladas y grandes instalaciones turísticas por todo tipode suelos rústicos, incluidos los protegidos", critica.
Así, opina que con esta ley se aumentará la involución territorial, medioambiental y paisajística de toda Cantabria, "al transformar el medio rural de nuestra comunidad en un espacio urbanodesordenado".
"Su aplicación dañará de forma importante la capacidad productiva del espacio rural, potenciando la economía especulativa en nuestros pueblos y atentando contra el potencial característico de este territorio, basado en las actividades agroganaderas, forestales y naturales", asegura.
