La edad media en el momento de la defunción ha crecido un año más en Cantabria, de 80,7 a 80,9 años a 1 de enero de 2019, según el 'Boletín de síntesis demográfica. Cantabria 2019' del Instituto Cántabro de Estadística (ICANE).
También en España ha aumentado la edad en el momento de la muerte, aunque es inferior a la de Cantabria, al subir de 79,7 a 79,8 años.
Durante 2018 se registraron 6.096 defunciones de residentes en Cantabria, lo que supone un aumento del 2,3% con respecto a 2017.
Por sexos, mientas entre los hombres residentes en la región la edad media de defunción ha crecido hasta los 77,6 años --frente a los 77,5 de 2017--, entre las mujeres es un poco mayor, de 84 años en 2017 a 84,3 años en 2018.
En todo el país también se ha incrementado la edad de los hombres hasta 76,6 años, y la de las mujeres hasta 83 años.
El escaso crecimiento de la población, junto al aumento del número de defunciones, hacen que la Tasa Bruta de Mortalidad (TBM) crezca ligeramente en 2018 en Cantabria, un 10,3 frente al 10,5, y es superior a la media nacional del 9,1.
Las principales causas de muerte en Cantabria son tumores, origen del 28% de las defunciones, seguidos de enfermedades del sistema circulatorio con un 26% y de las enfermedades del sistema respiratorio con el 13%.
En concreto, la mortalidad está causada principalmente por trastornos mentales orgánicos, senil y presenil (8,9%), otras enfermedades del sistema respiratorio (6,8%), enfermedades cerebrovasculares (6,1%), y tumor maligno de la tráquea, bronquios y del pulmón (6%).
Por sexo las causas de muerte varían. Para los hombres la principal son los tumores, mayoritariamente tumor maligno de tráquea, bronquios y pulmón (8,5%), seguidos de trastornos mentales orgánicos, senil y presenil (5,8%), y otras enfermedades del corazón (5,6%).
En el caso de las mujeres la principal causa son las enfermedades del sistema circulatorio responsables del 28%. Específicamente los trastornos mentales orgánicos, senil y presenil (12%), otras enfermedades del sistema respiratorio (8,6%) y enfermedades cerebrovasculares (7,1%).
