La Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) está llevando a cabo diversas actuaciones de conservación en las defensas del cauce del río Bisueña en las inmediaciones del municipio Bárcena de Pie de Concha.
Según ha informado la CHC, el río Bisueña ha erosionado las márgenes del cauce, debilitando sus defensas en varios puntos, en el entorno del núcleo de Bárcena, en una longitud aproximada total de unos 300 metros. También se han depositado acarreos y restos vegetales en el cauce.
La zona se encuentra catalogada como Área de Riesgo Potencial Significativo de Inundación (ARPSI) de acuerdo con al Decreto 903/2010, de 9 de julio, de evaluación y gestión de riesgos de inundación, que transpuso al ordenamiento jurídico español la Directiva de Inundaciones (Directiva 2007/60/CE).
Las labores de conservación, que llevadas a cabo por la empresa pública Tragsa, suponen una inversión de 116.847 euros y consisten principalmente en la retirada de árboles muertos y restos y tapones vegetales del cauce y la eliminación de árboles con riesgo de caída.
También incluyen la recolocación de acarreos en las márgenes del cauce y transporte del material sobrante a lugar de acopio en diversas zonas; y la reconstrucción de cinco escolleras, en las márgenes del río, con talud superior restaurado mediante técnicas de bioingeniería (tierra vegetal, estaquillado de sauces, malla de coco y semillado).
Asimismo, se procederá también al tratamiento de la vegetación exótica invasora que se pudiera encontrar en cualquiera de las zonas de actuación y en las zonas de acopio del acarreo sobrante.
Esta actuación forma parte de los trabajos de conservación, mantenimiento y reparación de daños en el dominio público hidráulico que está ejecutando la CHC en el territorio de la comunidad autónoma de Cantabria, fundamentalmente fuera de las zonas urbanas en las que las labores de conservación y mantenimiento de cauces son competencia de los propios ayuntamientos.
Hasta el 25 de octubre, la inversión destinada en Cantabria a la conservación de cauces fue de 1.742.068 euros, según ha informado la Confederación Hidrográfica del Cantábrico.
