La Virgen de Valencia: el reflejo del pueblo de Piélagos, de su cariño por las tradiciones y de su amor por la tierra
El alcalde de Piélagos, Carlos Caramés, ha asegurado este lunes, 8 de septiembre, que las fiestas de la Virgen de Valencia, patrona del municipio, han sido siempre “mucho más que unos días de música, bailes y romerías”.
De hecho, se ha mostrado convencido de que “son el reflejo del pueblo de Piélagos, de nuestro cariño por las tradicionales, de nuestro amor por la tierra y de nuestra manera de vivir la vida, compartiéndola con los demás”.
Así lo ha afirmado durante su intervención desde el balcón del Centro de interpretación del Valle de Piélagos, donde ha lanzado el chupinazo acompañado por la alcaldesa pedánea de la Vioño, Inmaculada Araunabeña; el consejero de Cultura, Luis Martínez Abad; la presidenta de Cantabria, Mª José Sáenz de Buruaga y el director de la Escuela municipal de Folclore desde 1991, José Luis Rivera Cobo, que ha sido el pregonero de las fiestas.
De éste último, ha dicho, “es un ejemplo de cómo el amor a la tradición no nos ancla en el pasado sino que nos impulsa a seguir adelante”. “De eso se trata: de crecer, de evoluciona, pero hacerlo de manera sostenible”, ha apostillado.
Caramés, quien ha anunciado que mañana viajará con representantes del Gobierno y de otros ayuntamientos a Chile donde la UNESCO entregará el reconocimiento oficial al Geoparque de Costa Quebrada -del que Piélagos no sólo forma parte sino que es posiblemente su esencia- ha recalcado que se trata de “un punto de partida” porque, en su opinión, “el verdadero trabajo comienza ahora”.
En este sentido, ha recordado que el Ayuntamiento de Piélagos ha elaborado una estrategia municipal de sostenibilidad y un plan de turismo sostenible con 30 acciones.
“Queremos que cada inversión, nuevo servicio y proyecto que ponemos en marcha -como los incluidos en la modificación de créditos por importe de 5 millones de euros aprobada la pasada semana- sea siempre compatible con lo que somos, con nuestra identidad y sirva para mejorar el bienestar de quienes aquí vivimos”, ha enfatizado.
El regidor municipal ha reiterado que “cuidar las tradiciones también significa cuidar a nuestros vecinos, a nuestras familias y a nuestro medio ambiente”.
“Somos lo que somos porque fuimos como fuimos”
Por su parte José Luis Rivera, el hijo de José Luis Rivera Peña “Chiqui” de Tanos y de Pilar Cobo Saiz, la hija de Cuca y Anatalio, que nació en el Barrio de las Cavadas de Salcedo, el Lugar de los Sauces, ha reconocido que retornar a Piélagos, a la Virgen de Valencia y a Salcedo es “regresar a lo esencial, a la seguridad de lo conocido y lo reconocido y a la calidez del hogar”.
En este sentido, ha abogado por no renunciar al pasado y las tradiciones porque en ellos se encuentra el sustento de los que somos y lo que representamos en el mundo. “Somos lo que somos porque fuimos como fuimos”, ha subrayado.
Durante su intervención desde el balcón del centro de interpretación del Valle de Piélagos, el pregonero de las Fiestas de la Virgen de Valencia 2025 ha hecho hincapié en que ”el mundo de las tradiciones es un escenario poblado de gentes anónimas que con su entrega, recio empeño e ilusión han ido tejiendo el entramado de usos y costumbres que nos distinguen y sostienen”.
José Luis Rivera ha explicado que el folclore en sus diversas expresiones goza, desde hace décadas, de “una razonable buena salud”, pero ha advertido de que no siempre fue así. Es más, ha rememorado un tiempo en el que la sombra de la incomprensión y la insensibilidad se cernían amenazantes sobre el acervo tradicional de esta tierra.
“Afortunadamente, esa delicada situación parece superada gracias a la complicidad y el apoyo de las instituciones y al aliento de las gentes de Cantabria, que no dudan en considerar al folclore, como motivo de orgullo y emblema de identidad”, ha defendido.
Como ejemplo, se ha referido a la Escuela municipal de folclore de Piélagos, a punto cumplir los 35 años de historia, lo que la convierte en una de las decanas de Cantabria.