Casi un centenar de niños y jóvenes se inician o perfeccionan cada curso escolar la difícil, pero bonita técnica del tenis en la Escuela municipal de Piélagos
Casi un centenar de niños y jóvenes se inician o perfeccionan cada curso escolar la difícil, pero bonita técnica del tenis en la Escuela municipal del Ayuntamiento de Piélagos.
A ellos se suman los participantes en los cursos quincenales que el Consistorio desarrolla durante los meses de julio y agosto, nuevos alumnos que se quieren acercar al deporte y conocerlo por primera vez, pero también “muchos de los habituales” de esta práctica deportiva.
En ambos casos, según explica Sydney Cano, vicepresidente de la Federación cántabra de tenis fundador, director y entrenador de Alpha Tennis Player y responsable de la Escuela municipal de tenis y de los cursos estivales de Piélagos, existen varios niveles: desde los 6 años, hasta los 16 ó 17.
Los más pequeños se inician, toman conciencia de conceptos básicos de la técnica de los golpes, de la posición en la pista, del juego de pies, de la normativa y del tanteo, relata Sydney Cano, quien afirma que el tenis es un deporte “muy bonito”, pero también “difícil”.
Es este sentido, incide en que es “muy completo, tanto física como mentalmente” y recuerda que “no es un deporte de equipo en el que te pueden sustituir si tienes un mal día además de tener al resto de compañeros que te respaldan, aquí estás tú solo”.
El responsable de la Escuela municipal de tenis de Piélagos y de los cursos de verano apunta que existen también grupos de perfeccionamiento donde ya se llevan cabo “situaciones de juego más reales” y en los que se depuran los golpes, los efectos, la dirección o la consistencia, es decir, la capacidad de mantener la bola en juego durante muchos golpes seguidos.
Un deporte que exige mucho
Sydney Cano recalca que, a nivel mental de disciplina y concentración, el tenis es “un deporte que exige mucho”, al tiempo que aclara en que “puede haber gente muy buena técnicamente que si la cabeza no le acompaña no va a conseguir jugar bien”.
De hecho, subraya la importancia del “concepto mental” a nivel táctico, de reflejos y de percepción.
“A los niños al principio les cuesta mucho, pero un jugador, a medida que se va desarrollando, va adquiriendo la capacidad de leer el golpe de su contrario cuando pega a la bola, para anticiparse dónde va a botar y colocarse en función de ello para golpeara lo mejor posible”, relata el director de la Escuelas de municipales de tenis y pádel de Piélagos, quien añade que, “mientras la estás golpeando también con la vista periférica hay que saber dónde está tu contrario para colocar”.
Preguntado sobre qué es lo que más cuesta a los nuevos alumnos, responde que el saque, al que se refiere como “el golpe más complejo” al ser el que más segmentos tiene y partes del cuerpo involucra, tanto a nivel técnico como del aprendizaje.
A este respecto, afirma que, aunque es lo más tedioso de desarrollar, mediante el juego se consigue que los más pequeños “aprendan y se diviertan”.
Torneos internos
La Escuela municipal de tenis de Piélagos desarrolla sus actividades entre los meses de octubre y mayo en cinco localidades del municipio: Arce, donde el Ayuntamiento ha renovado integralmente las pistas existentes recuperando los sistemas de drenaje y aplicando un nuevo revestimiento y pintado; Liencres; Mortera; Renedo y Vioño.
Dos veces al año celebra torneos internos adaptados al nivel de cada grupo, que en unos casos enfrentan unos grupos contra otros y en otros, a los alumnos de una misma clase en una especie de liga o campeonato de habilidades (según edad y nivel) que tienen lugar dentro del horario de las clases para lograr una participación del 100 por cien.
No obstante, reconoce que “llegar a nivel de competición conlleva unos cuantos años de juego de por medio”.
Respecto al efecto llamada entre los niños y jóvenes de jugadores como Rafa Nadal o Carlos Alcaraz, Sydney Cano confirma que son jugadores que tienen “mucho tirón” y un “movimiento de masas espectacular”, que son grandes referentes e ídolos de los más jóvenes.
En la misma línea, respecto al auge del deporte del pádel, especialmente en los últimos años, comenta que no se ha dejado sentir en el número de alumnos de las dos escuelas municipales. “Tanto la de tenis como la de pádel las tenemos a rebosar, por igual, nunca hay más en uno que en otro”, apostilla.
Sydney Cano, también director de los cursos de verano y de la Escuela municipal de pádel de Piélagos, señala que las pautas y la metodología desarrollada en el tenis son extensibles a ambos deportes al margen de sus conceptos básicos diferenciadores, como los golpes de salida de pared, en el caso del pádel.
Sobre este último deporte, admite que es “un poco más fácil” porque la superficie de contacto con la bola está más cerca de la mano del jugador y la coordinación óculo-manual es “un poquito menos exigente”.
La superficie de juego es más pequeña y está más cerca, tienes que cubrir menos pista y normalmente lo haces con un compañero, sin olvidar que si la bola que te sobrepasa la dejas pasar rebota y vuelve lo que te da una especie de segunda oportunidad, reflexiona Sydney Cano.
“Una vez que vas desarrollándote los golpes se van dificultando y sigue siendo un deporte difícil porque la velocidad de bola cambia, los ángulos, los efectos”, concluye.