Un total de 245 niños, con edades comprendidas entre los 4 meses y los 3 años, han participado este en las ecoescuelas del Ayuntamiento de Piélagos, 130 en la guardería Garruchines de Boo y 115 en La Jilguera de Renedo.
Desde el curso 2020-2021 la empresa Kiriku Galo, adjudicataria de las dos guarderías-ludotecas municipales incorporó a su proyecto educativo el Programa Ecoescuelas que, bajo la tutela de la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC), acerca la importancia del cuidado y el respeto del medioambiente a los alumnos, pero también a sus familias y a los trabajadores de ambos centros, ha indicado el Consistorio en nota de prensa.
De esta forma, a las actividades que se desarrollan de lunes a viernes, entre las 7.30 y las 17.00 horas en Boo, y hasta las 15.30 horas en Renedo, se han incorporado algunas ecotareas, que tienen como finalidad no s0lo inculcar entre los más pequeños la importancia de 'la regla de las 3 erres' --reducir, reutilizar y reciclar-- sino también la importancia de cuidar la biodiversidad y respetar el medioambiente.
A través de una metodología práctica y participativa en la que los alumnos son los protagonistas del aprendizaje, los más pequeños descubren las singularidades del mar en un barreño, a través de conchas en hielo y bolsas sensoriales; estimulan sus sentidos mediante proyectos de tiempo libre; trabajan la psicomotricidad o experimentan siempre a partir del juego.
Todo ello, sin olvidarse del trabajo diario en los huertos y mesas de cultivo que ambos centros tienen, donde los alumnos desde edades muy tempranas aprenden a trabajar la tierra, a plantar semillas de temporada y a regarlas para alimentarlas y ver crecer tomates, lechugas, pimientos o fresas.
OASIS DE MARIPOSAS Y ESTANQUE DE PECES
Además, este verano ambos centros han incorporado dos nuevas instalaciones dentro de su Proyecto de Ecoescuelas: un oasis para mariposas en Renedo y un estanque con peces en Boo.
El coordinador de la guardería municipal La Jilguera de Renedo, Ismael Mazón, ha explicado que, en colaboración con la Asociación española para la protección de las mariposas y su medio (ZERYNTHIA), el centro ha instalado un oasis de mariposas.
Se trata de un espacio natural que busca la atracción de estos insectos, a través de especies vegetales que favorezcan su alimentación, facilitando, al mismo tiempo, su observación por parte de los niños.
Idéntico objetivo comparte el estanque con peces instalado en la guardería municipal Garruchines de Boo que, según su coordinadora, María Sánchez Ibaseta, no solo tienen la posibilidad de observar la vida de estos pequeños animales acuáticos sino también de participar activamente en su cuidado, aprendiendo, una vez más, a través de la experiencia.
Las guarderías-ludotecas municipales de Piélagos (La Jilguera de Renedo y Garruchines en Boo) fueron dos de los tres primeros centros de estas características en Cantabria distinguidos con la bandera verde de la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC), en reconocimiento a su trabajo como Ecoescuelas durante los últimos tres años.
