Alumnos de cuatro municipios venden con fines solidarios en Renedo
Los alumnos del Colegio Antonio Robinet de Vioño han salido a la calle para participar en el VII Mercado de cooperativas escolares celebrado en el Polideportivo municipal de Renedo, donde han vendido con un fin solidario los productos previamente elaborados en el aula.
Lo han hecho en el marco de la iniciativa que promueve anualmente la Asociación de Centros de Enseñanza de Economía Social de Cantabria (ACES-Cantabria) con el objetivo de que los estudiantes de las 12 cooperativas educativas que integran la misma puedan culminar los proyectos educativos de emprendimiento, promoción y difusión de la Economía Social que llevan a cabo desde el comienzo del curso escolar.
En esta ocasión, alumnos de cinco de las citadas cooperativas escolares (Altamira de Revilla de Camargo; Verdemar de Santander, Niño Jesús de Praga y El Salvador de Torrelavega y Antonio Robinet de Vioño) se han dado cita en un mercado, donde la ilusión compartía protagonismo con el conocimiento y la solidaridad.
“Se trata de una metodología activa”, explica Ana Holgado, profesora del Colegio Antonio Robinet, quien destaca que, además de conocer qué es una cooperativa y la Economía Social, a través de este proyecto, los alumnos tienen la oportunidad de trabajar de manera práctica todo tipo de conocimientos y materias.
Utilizan la Lengua para la elaboración de todos los documentos de las cooperativas; las Matemáticas para llevar sus cuentas; Naturales, en muchos casos, para la elaboración de los productos y Plástica, en todo lo que concierne a la cartelería y el diseño, subraya esta docente, quien concluye que “es todo muy completo”.
Lo más bonito es que trabajamos todos juntos
Rodrigo Aranda, alumno de 6º de Primaria del Colegio Antonio Robinet de Vioño, afirma que haber creado una cooperativa ha sido una experiencia divertida con la que, además, obtener dinero para el viaje de fin de curso.
Sin embargo, reconoce que lo más difícil fue ahorrar dinero para comprar el material necesario para elaborar productos como máscaras, marcapáginas o elementos decorativos para las macetas que también vende su cooperativa y gestionar las cuentas.
“Lo más bonito es que colaboramos todos juntos en una cooperativa, todos los niños nos juntamos para hacer productos y cosas”, subraya su compañero de clase y proyecto, Diego Seijas, quien apunta que, de esta forma, “aprendes cosas que no sabías de ellos”.
Rodrigo y Sergio explican que los carteles de su cooperativa cuentan con códigos QR que permiten conocer no sólo los Objetivos de Desarrollo Sostenible, sino también el proyecto de Cruz Roja con el que va a colaborar su pequeña microempresa.
Más de 2.400 alumnos y 200 profesionales
Por su parte, Juan Pastor, presidente de ACES Cantabria, ha recordado que la Asociación aglutina a 12 cooperativas escolares distribuidas por toda la región: Colegio Altamira (Revilla de Camargo); Colegio Antonio Robinet (Vioño); Colegio Atalaya (Santander); Colegio El Salvador (Torrelavega); Centro E. Especial Lupasco (Santander); Colegio Mayer (Torrelavega), Colegio Niño Jesús de Praga (Torrelavega); Centro Puente I (Santander); Colegio Puente (El Astillero); Liceo San Juan de la Canal (Soto de la Marina); Centro E. Infantil Tagore (Santander) y Colegio Verdemar (Santander).
En este sentido, explica que, a través de las mismas se busca trasladar ese sentido cooperativo al alumnado y, como prueba, apunta la puesta en marcha de esas microempresas escolares que han decidido sacar adelante una producción para venderla con fines solidarios.
“Desde el inicio de curso explicamos qué es la Economía Social, utilizamos las Matemáticas para ello y todo nuestro sentir pedagógico para poder involucrar al alumnado en esta encomienda que tienen”, comenta Juan Pastor.
En este sentido, apunta que la idea fundamental es que entiendan cómo funciona la economía, que hay que hacer una aportación inicial para sacar adelante una pequeña empresa, que las cuentas salgan y que, en este caso, tenga un fin solidario.
El presidente de la Asociación de Centros de Enseñanza de Economía Social de Cantabria, que cuenta con más de 2.400 alumnos y 200 profesionales, hace hincapié en la ilusión que conlleva este proyecto de aprendizaje a través de la experiencia.
Desde el inicio del curso, se percibe cómo el alumnado da todo de sí, desde la creación de la microempresa hasta la venta de sus productos en el Mercado de Cooperativas Escolares, asegura Juan Pastor, quien felicita a todos los participantes por el trabajo maravilloso que hacen año tras año