Revilla censura el "acoso" a Fuerzas de Seguridad del Estado y pide "diálogo" a Gobierno y Generalitat

Cree que los actuales interlocutores son dos "muros" y espera que aparezcan personas "sensatas" en los dos bloques que puedan dialogar

Cree que los actuales interlocutores son dos "muros" y espera que aparezcan personas "sensatas" en los dos bloques que puedan dialogar

SANTANDER, 3

El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla (PRC), ha censurado el "acoso" a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado desplazadas a Cataluña con motivo del 1-O y ha insistido en la necesidad de "diálogo" entre Gobierno de España y Generalitat pero cree que con los actuales interlocutores "esto no tiene arreglo" pues son "dos muros".

"Yo creo que tiene que aparecer alguna persona sensata en ambos bloques: en el Gobierno de la Nación y en el Parlamento catalán o en el propio Gobierno catalán que entienda que esto es una locura, que ha llevado a situaciones de enfrentamiento que yo no podía imaginarme", ha afirmado este lunes a Revilla sobre lo ocurrido el 1-O en Cataluña y lo que puede pasar ahora.

Revilla ha asegurado que le "ha llenado de preocupación" ver a través de los medios de comunicación algunas escenas de "acoso" a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, cuando, a su juicio, son "meros ejecutores de órdenes judiciales o políticas de alto nivel que ellos cumplen como trabajadores", y ha señalado que "le recuerdan a otras etapas, en otro lugar de España, afortunadamente ya desaparecidos".

Cuestionado por el futuro en Cataluña tras el 1-O, el jefe del Ejecutivo regional ha insistido en que se trata de un tema "muy complejo" y ha vuelto a cuestionar la capacidad de los actuales interlocutores para arreglar la situación.

"Con los interlocutores que tenemos en Cataluña que han vulnerado la Ley deliberadamente y han dado un autogolpe de Estado y un presidente en Madrid inmovilista esto no tiene arreglo", ha insistido Revilla, que espera la aparición de esa "persona sensata" en cad auno de los bloques que puedan llevar a cabo ese "diálogo" que, a su juicio, se precisa.