Las rampas y ascensor de conexión Paseo Pereda-General Dávila se licitan en mayo por 2,1 millones

Las obras para conectar el Paseo de Pereda con General Dávila mediante rampas mecánicas y un ascensor saldrán a licitación este próximo mes de mayo por un presupuesto de algo más de 2,1 millones de euros.

SANTANDER, 29

Las obras para conectar el Paseo de Pereda con General Dávila mediante rampas mecánicas y un ascensor saldrán a licitación este próximo mes de mayo por un presupuesto de algo más de 2,1 millones de euros.

Lo ha avanzado este sábado el concejal de Medio Ambiente y Movilidad Sostenible, José Ignacio Quirós, quien ha explicado que la Junta de Gobierno Local ha aprobado esta semana el expediente para la contratación de las obras. Así, el plazo para presentar ofertas se abrirá en los próximos días, una vez se publique el anuncio en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC).

De esta forma, se espera que las obras, que tienen un plazo de ejecución de diez meses, estén adjudicadas y puedan iniciarse después de la temporada estival.

El proyecto, que discurre a través de la calle Lope de Vega, Entrehuertas y Santa Teresa, hasta desembocar en la Finca Jado, contempla la ejecución de una escalera y cuatro rampas mecánicas, así como de un ascensor con el fin de salvar un desnivel total de 75 metros.

Aprovecha también las escaleras mecánicas existentes ya en el grupo El Carmelo y enlaza con el trazado que se puso en servicio en enero entre la avenida de Los Castros y General Dávila a través del parque y la Bajada de La Teja.

De esta manera, con esta nueva actuación se completa todo un corredor transversal que cruza la ciudad desde la bahía hasta el campus universitario a través de elementos mecánicos que salvan los tramos de mayor pendiente del recorrido.

La elección del itinerario se ha basado en un estudio previo de alternativas que, después de analizar ocho opciones diferentes, identificó ésta como la mejor solución para seguir favoreciendo los corredores transversales a lo largo de la ciudad.

Además, se aprovecharán las obras para acometer también otras mejoras en el entorno, tanto con actuaciones en las redes de abastecimiento y saneamiento, como generando nuevas zonas estanciales.

PROYECTO

Este corredor vertical que conectará el Paseo de Pereda con General Dávila se divide en tres tramos diferentes.

En el primero de ellos, correspondiente a la calle Lope de Vega, se plantea la instalación de dos rampas mecánicas (de 32,6 y 34 metros de longitud, respectivamente) en el tramo de mayor pendiente (entre las calles Daoíz y Velarde y Santa Lucía).

En un segundo tramo, entre la calle Sol y Entrehuertas, se plantean dos rampas más (de 21,6 y 25,3 metros) que parten del lateral Oeste de la iglesia de los Carmelitas y conducen a un ascensor que desembarcará en una pasarela de hormigón que desemboca en la calle Santa Teresa, donde avanzando unos metros hacia el Este se enlaza con las escaleras mecánicas del grupo El Carmelo.

Por último, en el tercer tramo se prevé construir una escalera mecánica que cubra el tramo final de recorrido entre la calle Prado San Roque y la Finca Jado.

El proyecto incluye además la creación de un nuevo espacio de estancia para los vecinos entre las dos rampas que unen la calle del Sol y Entrehuertas, y la generación de otras zonas verdes a lo largo del recorrido. Igualmente, se aprovechará para acometer también mejoras en las redes de abastecimiento y saneamiento.

Así, en la calle Lope de Vega se renovará el antiguo colector de hormigón que discurre entre Daoíz y Velarde y Santa Lucía, que será sustituido por una tubería de PVC de 800 milímetros de diámetro; mientras que en el tramo comprendido entre Daoíz y Velarde y Ataúlfo Argenta, donde existe actualmente una galería longitudinal, se colocará una conducción de PVC de 1.000 mm.

También se sustituirán dos tramos más de tubería en el entorno de la calle Bonifaz, y se modificarán y ampliarán algunos tramos de la red de saneamiento entre la calle del Sol y Entrehuertas.

Por último, en la red de abastecimiento se renovarán unos 350 metros de tuberías en Lope de Vega, sustituyendo conducciones actuales de fibrocemento por otras de fundición dúctil.