El desescombro del edificio siniestrado en Santander se desarrollan entre la lluvia y la mirada de vecinos y curiosos

Las labores de desescombro del edificio de la calle del Sol de Santander siniestrado ayer por la tarde tras venirse abajo una de sus fachadas solo unas horas después de haber sido desalojado por la aparición de grietas van avanzando entre la mirada de algunos vecinos del inmueble y unos pocos curiosos que continúan siguiendo estos trabajos pese a la lluvia que esta cayendo en la capital cántabra.

SANTANDER, 20

Las labores de desescombro del edificio de la calle del Sol de Santander siniestrado ayer por la tarde tras venirse abajo una de sus fachadas solo unas horas después de haber sido desalojado por la aparición de grietas van avanzando entre la mirada de algunos vecinos del inmueble y unos pocos curiosos que continúan siguiendo estos trabajos pese a la lluvia que esta cayendo en la capital cántabra.

Operarios de la empresa Palomera, a la que el Ayuntamiento ha encargado esta misión, han estado trabajando durante toda la noche, según han explicado a Europa Press fuentes de los Bomberos, cuyos efectivos han estado presentes también durante todas estas horas.

Estas labores están siendo supervisadas y dirigidas por técnicos que, por el momento, no han querido hablar con los medios de comunicación que también están siguiendo las actuaciones en la zona.

Algunos de los responsables técnicos de estas obras han abandonado el lugar poco antes de las 11.00 horas para acudir al Ayuntamiento, donde a las 13.00 horas hay prevista una reunión con miembros de la Corporación y representantes de los vecinos.

También hacia allí se ha dirigido la presidenta de la comunidad del inmueble, Jana Coloma, que reside en una de las viviendas del tercer piso del edificio.

Al Ayuntamiento también han acudido los abogados de la comunidad, según han informado a Europa Press algunos de los vecinos allí presentes.

Uno de ellos es Benjamín Gándara, vecino del tercero izquierda quien, junto a su esposa, ha estado en la zona siguiendo los trabajos.

Desde allí, puede ver el mueble de su salón, que tras el desplome ha quedado a la vista.

Según ha explicado a los medios, confía en poder recuperar algunas de las cosas que guardaba en dicho mueble, donde hay fundamentalmente "muchos recuerdos de toda la vida" y "sobre todo" fotografías.

Y es que este vecino lleva viviendo 42 años en este edificio de 15 viviendas, que data de la década de los 50 del siglo pasado.

Benjamín ha reconocido que él y su mujer lo han "pasado mal" esta noche, la primera después del derrumbe.

"Mentalmente estás hundido porque son 42 años viviendo ahí y se van todos los recuerdos. Eso no te lo va a devolver nadie", ha apuntado Benjamín, que confía en que si la parte del edificio que no se ha desplomado no ha sufrido daños el inmueble "se pueda reconstruir" para "volver a vivir donde ha vivido toda la vida".

Su esposa, que en algunos momentos no ha podido contener las lágrimas y ha preferido que sea su marido el que atienda a los medios, solo ha señalado que cree que los trabajos "van para largo".

Este matrimonio no ha tenido que pasar la noche en el Centro de acogida Pricesa Letizia como algunos vecinos del inmueble que no tenían un lugar donde dormir ya que "tienen la suerte de tener una casa en el pueblo", en Suesa.

Respecto a la actitud del Ayuntamiento, ha explicado que por el momento se "está portando bien".

"Esperamos que siga haciendo lo mismo hasta que se tomen todas las soluciones a ver quién es el responsable", ha apuntado el marido, que coincide con la opinión "generalizada" en los vecinos de que la causa de lo ocurrido han sido las obras de acondicionamiento de uno de los locales del bajo del inmueble, el del antiguo 'Masters'.

"Yo he visto meter ahí una mini pala y estar picando. Qué es lo que se han cargado, no lo sé porque no hemos entrado ninguno. Pero bueno, esperemos que los técnicos digan por qué ha sido", ha dicho.

CONTINÚAN LOS CORTES EN CALLES ALEDAÑAS

También en la zona se encuentran efectivos de la Policía Local, que mantienen cortado con cintas e incluso sus propios vehículos en la tráfico en la zona.

Así, por el momento la salida de la calle Tetuán a la rotonda de la Sardinera está cerrada y los vehículos solo pueden dirigirse hacia la calle de la Montañesa o llegar a Canalejas atravesando la calle de los Padres Escolapios.

También hay cortes en la calle del Sol y parte de Casimiro Sáinz y sigue cerrado al tráfico el túnel de Tetuán, donde se encuentra la grúa que está realizando las labores de desescombro.